Esta noche he engañado al miedo.
Jugábamos al escondite, y debía contar hasta cien con los ojos vendados, claro que él no sabe de números… y yo sin zapatos nuevos cuidando no despertar a los que ya sueñan… he gateado por mi ventana, arropada por un miércoles recién estrenado. La luna se ha puesto su mejor traje, de lentejuelas, porque ilumina toda mi calle, y las estrellas con previa invitación se han agolpado para ver el espectáculo. Dejando al miedo atrás, he caminado por la cuerda floja bailando para la luna, marcando pasos que nunca aprendí, y sonriendo ante los guiños de cada estrella. La luna ha tendido su alfombra de luz, y en ella he disfrutado de la magia de una noche… mi noche… dedicando mi mejor mirada, mi mejor susurro, a una LUNA que hoy está LLENA de felicidad…
….Mi pies tambalean, la danza se vuelve dudosa, mis pies descalzos sienten frío, la música de la brisa entrecortada, las pupilas se dilatan y mis brazos quedan inmóviles…. No puedo pronunciar ni una palabra… cierro los ojos… el vacío se apodera de mí……
Y es que el miedo ha escapado del cajón… y me observa desde mi ventana…